Gente difirente... [Privado Dante y Raven]

Me sentia débil de esa caída desde el cielo... no sabia si estaba soñando o era verdad... solo me di cuenta de que en cuanto abrí los ojos, vi mucha gente... niños y niñas pequeñas... era muy raro... pero mucho mas raro aún cuando vi que la piel que tenian era de piel negra... me asusté al verlos y me levante sacando mis Kunais... Salieron corriendo y chillando... yo me quedé mirandolos... y les dije:
Eso! Eso huid! Y no volvais!

En cuanto me di cuenta... me giré y vi a otro niño de piel negra... le saqué los Kunais y le dije:
Atrás, huye como los demas... vete!

Se me quedó mirando y me dijo:
Tranquilo... no te tengo miedo... hablo tu idioma y te comprendo... estate tranquilo
En cuanto bajé los Kunais vi como venia mas gente detras mio, los niños de antes con sus respectivos padres con tridentes y chillando un idioma el cual no entendia mucho...
Me los quedé mirando pero el niño con el que hable me cogió la mano y me dijo:
Corre rapido ven! No te quedes ahi parado!
Subió a un camello que ahi habia... subimos los 2 y corrimos hacia el norte... no sabia ni que era ese sitio ni donde estaba... solo que llegamos a un rio bastante amplio... allí el niño de piel negra me dijo que estaria a salvo... antes de que se fuera le pregunté cual era su nombre...
Se llamaba Kyrt... Empezó a correr con el camello en direccion por donde vinimos... levantó la mano mientras desaparecía en el horizonte...
Me quedé solo en ese bosque con un rio...

Aterricé en un lugar desconocido, no estaba seguro de lo que acababa de pasar. Era un lugar que nunca antes había visitado ni visto; hacía calor y apenas habían plantas. Me recordaba al Desierto del Pesar, solo que aquí había mucha más vida, podía ver unos curiosos animales con un enorme cuello y otros más pequeños con cuernos que pastaban tranquilamente.
Avancé por aquél extraño lugar hasta llegar a un río donde me bañé para refrescarme del sofocante calor que habitaba en aquél lugar. Cuando salí del agua me tumbé en la base de un árbol para disfrutar de la agradable sombra mientras aprovechaba para descansar.
Al cabo de poco me percaté de que se había acercado alguien, no sabía si era amigo o enemigo, estaba de espalda a mí, así que empuñé el cuchillo en mi mano derecha y la escondí tras mi espalda.
-Disculpe, hola, habla usted mi idioma?-
Aunque le hablase de buena gana no esperaba que me entendiera, es más, esperaba que me atacara o se asustase y saliera corriendo.

Mientras estaba en ese sitio al lado de un arbol, escuché que alguien respiraba lentamente detras de un arbol... mis oídos habian percatado ese sonido...
Me di media vuelta y vi a un hombre un tanto malvado... esos ojos azules resplendian en su mirada tristeza rabia y dolor... entonces me preguntó que si hablaba su idioma... le miré de arriba a abajo y noté en su forma de hablar que llevaba algun arma escondida... sin intentar asustarlo para que atacase le dije:
Si... al parecer si...
Sin intentar ponerle nervioso le dije:
Por favor... tira el cuchillo que llevas... se que tienes una arma...
De repente, en cuanto le dije eso apareció una especie de animal con mucho pelo en el cuello... iba a cuatro patas... y tenia unos colmillos muy afilados... unas garras bien duras... y una gran rabia en cuanto rugía...
No sabia si esa bestia tenia algun gran poder... y para asegurarme, heché a correr...
No sabia si ese extraño hombre iba a hacer la misma accion que yo... pero ni me di cuenta de lo que hizo...

Al parecer si que hablaba mi idioma y no parecía peligroso, así que enfundé mi arma. De repente surgió una bestia entre la maleza y el joven que acababa de encontrar echó a correr, así que me tocó seguirle o combatir a la bestia y arriesgarme a perder de vista a aquél muchacho.
-¡Oye tú! No me dejes aquí solo!- le grité mientras desenfundaba mi cuchillo y me preparaba para el ataque de la bestia.
-Será cobarde...- murmuré.
La bestia empezó a correr hacia mí, salté por encima suyo y le propiné un tajo en el lomo. La bestia se enderezó y gruñó.
Seguía esperando que el muchacho regresara...

En cuanto corria para despistar a esa gran bestia vi como unas 12 o 13 mas pequeñas aparecian delante mio, asi que corri para ayudar a ese misterioso hombre, ya que la bestia contra la cual estaba peleando parecia un tanto mas peligrosa... fuí y vi como esa bestia rugía de dolor al ser cortado por ese hombre... no le vi en apuros... pero decidí ayudarle:
Detras vienen mas, acabemos con el mayor y los demás se asustaran
Saqué mis 2 Kunais y salte al lomo de esa bestia que rugía sin mas.... Empezó a correr hacia el hombre... pero antes de que se acercáse le clavé los Kunais en la Nuca...
Se acercaron las demás bestias mas pequeñas... y le dije a ese hombre sacando los Kunais...

4 manos ayudan mas que 2, no?

Esperé el movimiento de esas bestias...

El muchacho acabó con la bestia más grande, pero atrajo otras más pequeñas. Pensé que no valía la penar derramar más sangre, así que me convertí en bestia y lancé un grito intimidatorio para espantarlas. Huyeron todas salvo dos; una se quedó paralizada de terror y la otra corrió hacia mí, en cuanto saltó para atacarme la agarré del cuello y le propiné un fuerte puñetazo en el estómago, la lancé violentamente contra el suelo y terminé por degollarla de un zarpazo. Volví a mi forma humana para ahorrar energía.
-Fu... y ahora qué?
Mi pensamiento era investigar un poco más ese extraño lugar, pero desconocía los planes de aquél muchacho, además, quedaba una de esas bestias que nos estaba mirando atemorizada.

Vi como aquel hombre se transformó en un lobo...
"Será un licántropo?" Pensé... en cuanto vi que degolló a esa pobre béstia, le miré y lancé un Kunai al cuello de la bestia atemorizada... se enrabió y salto hacia mi... en el suelo, estaba a punto de triturar mi cuello... pedí a aquel hombre que me ayudara...
Yo esperaba a que reaccionase... esa bestia estaba furiosa como un demonio...

Aquella bestia se había tirado al cuello del muchacho dispuesta a matarlo. No me lo pensé dos veces, arremetí contra la bestia y me la llevé por delante, tirándola al suelo. Quedé por encima de ella, pero tenía mucha fuerza y no podía sujetarla, así que se terminó soltando. La bestia se volteó y me lanzó un zarpazo que me quitó el cuchillo de mi mano. Se disponía a saltar sobre mí, pero antes de dejarle actuar me transformé en lobo y me puse sobre dos patas. La bestia retrocedió y parecía asustada, lancé un terrible rugido e hice un amago para amedrentar a la bestia. La bestia terminó huyendo con el rabo entre las piernas.
Le ofrecí la mano al hombre que acababa de conocer, di un pequeño suspiro de satisfacción por la reciente victoria.

-Creo que no nos hemos presentado como es debido aún.- le dije mientras soltaba una leve sonrisa. -Soy Dante, adorador del Dios Oscuro y usuario de su arcana magia. Y como habrás observado, soy un licántropo-

Vi a aquel hombre tranformárse otra vez en lobo... la bestia acabó huyendo... dio un pequeño suspiro y me acercó su mano, presentándose...
Lo sabia... al parecer era un segudor del dios oscuro... justo con los que ni estaba en contra ni a favor... pero no me acababa de caer bien:
Yo soy Raven, uno de los mejores asesinos de Rosbasha... He oido hablar de ti... Dante... al parecer tambien eres asesino... un poco mas sádico que yo... pero lo eres...
Encantado. Le dije estrechándole la mano...


En cuanto le di la mano, escuché ruidos a unos 50 metros de esos hombres de piel negra gritando en busca mia...
Cojí la mano de ese tal Dante y le dije:
Vamos ven, ¡RÁPIDO!

Salté debajo de un par de troncos que habia ahí abajo... esos hombres iban armados con lanzas y arcos... montados a unos animales de cuello muy largo y con unas mini montañas en su lomo...

Nos presentemos y me dijo su nombre, Raven, un asesino bastante conocido en Rosbasha.
Justo después de la presentación llegó una horda de hombres de piel oscura armados con lanzas y arcos. Raven me agarró del brazo y nos escondimos detrás de dos troncos caídos. A mí me pareció un acto cobarde... después de ver como son las bestias de ese lugar, de bien seguro que aquellos extraños hombres serían igual de débiles...
A través de un pequeño agujero podía observar la situación. Aquellos extraños hombres se detuvieron y gritaban mientras apuntaban con sus armas a nuestro escondite, parecía que nos estaban avisando.
No aguantaba más... iba a salir de mi escondite y sembrar el terror en aquellos hombres... No lo dudé y salí dando un pequeño salto mientras me transformaba. Me puse sobre dos patas y lancé un tremendo rugido mientras partía un árbol por la mitad...

Cuando Dante salió y rugió, dije:
Bah, ya es igual...

Saqué mis Kunais y me lancé a un par de lanceros, golpeé sus lanzas y me las quité del medio para poder rajarles el cuello... antes de acabar con mas hombres le dije a Dante:

Y si son gente buena?

Raven salió conmigo y degolló a dos hombres, luego me preguntó si estaba seguro de que nos querían matar.
-Ni lo se ni me importa, yo solo quiero salir de este extraño lugar.
Acto seguido me precipité contra el hombre más cercano, tirándolo al suelo y poniéndome encima de él. Entonces le rugí en la cara y pude ver como lloraba de terror, me levanté y huyó corriendo. El resto le siguió. Volví a mi forma humana y suspiré un instante.
-Ves como no hacía falta matar a nadie? Y aquí el sádico soy yo- Dije mientras soltaba una leve sonrisa.
-Desconozco cuales son tus planes, pero yo quisiera regresar a Gold, aquí solo estoy retrasando mis planes...

Hasta el momento nadie había descubierto mis nuevas intenciones, creía que en este lugar hallaría información o ayuda, pero todo a resultado ser en vano.
Me temo que para completar mi plan debo recorrer Gold hasta reunir lo que necesito...

Sabia que Dante queria salir de ese sitio, igual que yo... le dije:

Sabes... yo amo a una chica...Nawin... la conocí durante la fortaleza de las edades... decidí estar junto a ella para siempre... no se si la volveré a ver... ademas... me iba a casar con ella... tener una familia... en fin... la amaba...

Me emocioné del todo... y hasta me salieron unas cuantas lagrimillas...
Miré a Dante y le dije:

Tu amabas a alguien?

El muchacho empezó a contarme que amaba a una chica, que se iba a casar, que quería formar una familia... hasta derramó alguna lágrima. Luego me preguntó que si amaba a alguien... hice como si no hubiera oído eso último.
-No sabía que estuvieras prometido Y por que dices que la amabas? Acaso ya no es así?.- el entablar conversación hizo que se cambiaran las cosas. Puede que no haya hecho este viaje en vano, después de todo. -Disculpa si te parece inoportuno, pero aún no me has dicho si usas algún tipo de magia- intenté no parecer demasiado interesado, pues no quería revelar mis verdaderas intenciones.

Dante me preguntó si usaba algun tipo de magia y le dije:

Sii!! Claro!! Mira, apartate y verás.

Saqué mi espada mayor, la mas grande que guardaba en la espalda, la posé en mis dos manos y pronuncié las palabras malditas:

Enrok-vitao-vi-han tumai, Dracosteen yet ugbet Raokan

El arma empezó a calentarse... y dije otra vez, ahora un poco mas fuerte:

Enrok-vitao-vi-han tumai, Dracosteen yet ugbet Raokan

Empezaron a salir chispas y chispas medianas del arma, entonces dije otra vez, pero ahora con mucha mas fuerza:

Enrok-vitao-vi-han tumai, Dracosteen yet ugbet Raokan

AAAaRRRGGGG!!!!!!

El arma sacó llamas realmente potentes... eso ardia a 100 o 200 grados por lo menos... no me acordaba de que necesitaba tener nivel 1 por lo menos para hacer ese ataque... asi que de la fuerza... me desmayé... yo estaba ardiendo, el arma tambien...

El muchacho me mostró sus poderes... imbuía su arma con magia ígnea!
-Magia ígnea...- murmuré. Puede que, después de todo, este tal Raven me sea útil.

Me percaté de que no estaba preparado para semejante ataque, parecía que iba a explotar en cualquier momento. Por suerte solo terminó desmayandose, pero estaba ardiendo, me transformé y lo lancé al río. Allí se despertaría, o eso esperaba...

Mientras esperaba su reacción, me detuve a pensar... Si conseguía ganarme su confianza me ayudaría con mi plan, y antes mencionó algo de una chica a la que amaba... tal vez podía usar esto en mi favor.

Al parecer me estaba ahogando y decidí despertarme de aquel rio... respiré y me pregunté a mi mismo si Dante me hubiese hecho algo... no le di mucha importancia... Aquel hombre, Dante... me empezó a caer bien... al salvarme le hice una leve sonrisa... le dije:

Tranquilo, no pasa nada... es la magia ígnea

Le dije sonriéndole...
Amigos? Quiero salir de aquí y volver a Gold!

Lo miré y le estreché la mano

Raven me ofrecía su amistad, me estrechó la mano (gesto que respondí de buena gana). Me disponía a contarle cuales eran mis intenciones, pero había algo en él que me hacía dudar... mejor esperar a que me demuestre lealtad.
Debía responder a su pregunta.
-Por supuesto, volvamos por el portal que llegué aquí, está al otro lado del río.-
Ya empezaba a caminar mientras seguía maquinando mis próximas acciones, sin duda este viaje significaba el comienzo de mi plan.

Me estrechó la mano y me ofreció su amistad... no lo ví muy decidido... en su cara veía una sonrisa de maldad... sin preocuparme caminamos hacia el otro lado del rio y vimos el portal... le miré a la cara y le dije:

Volveremos a vernos en Gold, Dante? Le indiqué con una sonrisa...

Ya nos encontrábamos frente al portal, entonces Raven dudó sobre si volveríamos a vernos en Gold.
-No tengas duda de ello!- le dije con una sonrisa en la cara poco frecuente en mí.
Acto seguido atravesé el portal... me sentía en casa. Sin apenas dejar tiempo para encontrarme con Raven, salí corriendo de allí, y sin mirar atrás me adentré a un pequeño bosque bastante cercano al portal.
En el camino de vuelta pensaría en como continuar con mi plan...

Dejo post.

Iba a ir yo primero, a atravesar el portal... pero Dante se me adelantó...

Atravesé el portal y aparecí en Rosbasha... la gente me miraba con rara cara... Los miraba y seguia caminando... Caminé hasta llegar a mi herreria y poder descansar...


Off: Dejo post yo tambien xD