Aquí estaba yo, rodeado de más de 5 dragones de grandes dimensiones preparados para dispararme cada uno una gran bola de fuego. Bueno, supongo que no sabréis como he acabado de esta manera, así que rebobinemos hasta esta mañana.
Yo iba tranquilamente volando para poder llegar hasta el Reino Humano, pero el hambre me había dado la orientación de un calamar en un desierto (Si algún calamar se ha sentido ofendido lo siento) La verdad es que no se cómo acabe en unas escarpadas montañas de las que sinceramente no sabía de su existencia. Decidí descender y explorar unos minutos en mi forma humana y así poder tomar un pequeño descanso tras este enorme viaje. Solté mi bolsa con mi comida para situaciones de emergencia y mis armas, estoy seguro que no fueron más de 5 segundos pero me giré en ese instante a mirar hacía delante y cuando me quise dar cuenta mis cosas habían desaparecido, un dragón de unas escamas muy verdes se veía llevándose mis cosas hasta una cueva, pero me dí cuenta de él demasiado tarde.
Una manada de dragones se sintieron amenazados por mi presencia y salieron de todos lados preparados para matarme, no tenía mis armas y no me habían dado tiempo a descansar, pero mantuve la esperanza y me arrodille para intentar descansar hasta el último momento.
Y así es como me encuentro ahora sin saber si alguien me ayudará o si tendré fuerzas para salvarme. Me pregunto... si... lo conseguiré.