Prueba número 1La prueba había comenzado. Mi misión, encontrar tres razas del bosque y llevarlas conmigo para completar dicha prueba.
Cogí mis enseres personales, tanto comida como protecciones y otros bártulos y salí de la torre dispuesta a cumplir mis objetivos.
Había oído que los ents eran seres que se confundían con los propios árboles por ser de madera y sus extremidades de ramas y raíces, brazos y piernas respectivamente. Que era muy difícil encontrarlos y que debía uno fijarse mucho en sus cortezas para identificar algún rasgo facial como la nariz, la boca y los ojos. Debía estar muy atenta. Me fui allí donde los árboles crecían fuertes y eran jóvenes, probablemente habría un ent que guiara a esos jóvenes árboles en la naturaleza. Todo ent tiene su rebaño.
Caminé durante dos horas y media cuando me detuve a contemplar un claro del bosque. Había varias piedras de diveros tamaños por ahí desperdigadas y decidí sentarme en una de ellas para tomar una tostada con mermelada y descansar. Me quedé allí y me fui fijando en los árboles que me rodeaban. El viento casi no soplaba, por lo que las hojas casi ni se movían. Vi varios arbustos con frutos silvestres y otros que tenían flores preciosas, esto me inspiró y además de hacer un alto para comer, decidí tocar algo con mi flauta dulce:
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Esto va por vosotros- y señalé a todo lo que me rodeaba que eran árboles y arbustos. Después de cinco minutos de tocar noté un pequeño movimiento entre las copas de los árboles ¿y si...? No dejé de tocar, quizás hubiera llamado la atención de algún ent. Y así fue, al movimiento de las ramas se sucedió una consecución de temblores en la tierra provocados por grandes pisadas y el crujir de corteza. Me levanté de la piedra y comencé a danzar un poco para no irme del ritmo. Cuando por fin tuve de frente esa imponente presencia, agaché la cabeza en señal de saludo y respeto. El ente se quedó a apenas quince metros de mi y me observó hasta que la canción se acabó.
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Espero que la música no haya turbado vuestro sueño, señor del bosque- dije todo lo educada que pude. El ent fue a responderme, había oído que eran calmados y se tomaban su tiempo para responder
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En absoluto joven humana, ¿que haces aqui? ¿Te has perdido?- me respondió cortesmente y pude comprobar su lento tono de voz. Negué con la cabeza y él se rascó la corteza con uno de sus dedos/ramas-
¿porqué estás aquí entonces?-
Señor, no pretendo mentiros. Estoy aquí porque deseo instruirme en el arte de la magia del bosque- comencé diciendo-
es para mí muy importante cumplir con los objetivos que me han mandado y estaría muy agradecida si me acompañárais a la torre. A cambio, me ofrezco a venir a tocar y a cuidar de todo lo natural que pueda y esté en mi mano.El ent calló un rato, no sé si porque estaba a punto de responder o porque estaba pensando algo que decirme. Más tarde habló -
es una buena noticia, alguien que se preocupa por la Naturaleza, si me prometes que tocarás de nuevo esa canción, iré contigo.Estaba realmente contenta. Sin buscarlo ahí había logrado uno de mis objetivos, pero aún me quedaban dos, así que decidí contarle al ent el resto.
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Estoy de verdad muy agradecida, pero aún debo convencer a una díadre y a un espíritu del bosque para que me acompañen- éste abrió más los ojos y me respondió.
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A una dríade la puedes convencer bailando, y si eres pura de corazón el espíritu se te presentará a ti y no tendrás por qué buscarlo, yo te esperaré aquí- me hizo una pequeña reverencia y se puso a pasear por el claro.
Tras esto, busqué cerca de algún manantial. Fui tocando la flauta y bailando. Pasó al menos una hora y media hasta que noté risas a mis espaldas ¿serían diadres? Seguí tocando y bailando con más ánimo. Pasó otra media hora cuando una mujer de tono de piel verde que se mostraba alegre se apareció ante mí y paré de tocar debido a la impresión.
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Por favor sigue tocando- me pidió y yo obedecí. Estuvimos bailando largo rato, la tarde ya había empezado a caer para cuando me quise dar cuenta. Ella se detuvo y me miró, sonrió y me dijo-
te acompaño, el ent se lo comunicó a los seres del bosque, ellos me avisaronMe dolían los músculos de tanto bailar y la boca la tenía muy seca de tanto tocar la flauta. Casi ni sentía la lengua. A pesar de eso, estaba contenta, sólo necesitaba al espíritu. Pero cuando llegué al claro y me reuní con el ent, sólo estaba él. A pesar de los ánimos que me dieron estaba algo desanimada.
Pero sabía cómo animarme, a pesar de todo el día con la flauta de un lado a otro, me dispuse a tocar una nueva melodía improvisada, divertida y amena que alegraba a las plantas, o eso creía porque parecía que todo estaba más verde y el ent y la diadre no dejaban de reír y moverse.
Cuando llegué casi a los pies de la torre donde me esperaba el instructor, se apareció una imagen que me envolvió. Era vida pura, el espíritu. Y estaba complacido.
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Te lo dije- me dijo el ent guiñándome un ojo
Diadre:
- Spoiler:
Ent:
- Spoiler:
Espíritu del Bosque:
- Spoiler:
La segunda pregunta fue:
Continua la serie:
98, 81, 85, 80, 97, 80.
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